RUMBO A FRANCIA 2024: NATACIÓN PARALÍMPICA
- By: Inclusión
La Historia y Evolución de la Natación y Natación Paralímpica
La natación, como deporte, tiene sus raíces en el Antiguo Egipto y la Grecia Clásica. A lo largo de los siglos, ha evolucionado para convertirse en una de las disciplinas más populares y practicadas en todo el mundo. La natación no solo es una actividad recreativa, sino también una competencia rigurosa que requiere habilidad, técnica y resistencia.
En el ámbito de la natación paralímpica, se practican cuatro estilos principales: libre, braza, espalda y mariposa. Estos estilos también se combinan en la prueba de estilos, que puede ser individual o de relevos. Todas las carreras en la natación paralímpica se disputan en piscinas de 50 metros, y los deportistas pueden comenzar desde tres posiciones diferentes: de pie sobre el poyete, sentados en el poyete o directamente desde dentro del agua.
Clasificación de los Nadadores Paralímpicos
Uno de los aspectos más destacados de la natación paralímpica es el sistema de clasificación, que asegura una competencia justa al agrupar a los nadadores según cómo afecta su discapacidad a la práctica de cada estilo. Las clases S1 a S10 engloban a aquellos con discapacidad física o parálisis cerebral, siendo los de la clase S1 los más afectados y los de la clase S10 los menos afectados. La clase S11 se reserva para los nadadores ciegos, las clases S12 y S13 para aquellos con discapacidad visual, y la clase S14 para la discapacidad intelectual.
La "S" delante del número de la clase se refiere a la categoría del nadador para las pruebas de estilo libre, espalda o mariposa. En el caso de la braza (SB), algunos nadadores con discapacidad física compiten en una clase más baja debido a la mayor propulsión de las piernas requerida por este estilo. Esta regla también se aplica para la prueba individual de estilos (SM).
Historia de la Natación Paralímpica
La natación es uno de los pocos deportes que se ha practicado de manera continua desde los primeros Juegos Paralímpicos, celebrados en Roma en 1960. Desde entonces, ha sido una parte integral de los Juegos Paralímpicos, ofreciendo una plataforma para que los atletas con discapacidad demuestren su destreza y competitividad en el agua.